El chaqué

Buenos días!!! casi tardes...

Estos dos días han sido horribles... estoy exhausta, después de los cuatro días en Sierra Nevada, no he sido capaz de recuperarme... me hago mayor!!! sniff!!! sniff!!!

Pese a ello, el tema que nos ronda estos días la cabeza es vestir al "príncipe azul"... jajaja!!!

O más bien la rana!!! Todavía oigo las risas y comentarios jocosos de los días en los que la elección del vestido de novia me quitó el sueño... que si menuda bobada, que no será tan difícil, que será por modelos y tiendas... y que suele pasar... que donde las dan, las toman... supongo que se notará un cierto tonillo burlón... y no es que me alegre de encontrarnos en éste punto, pero la sonrisilla se me escapa...

Resulta que tan alto, tan alto, tan delgado, tan delgado... que Fofito lucía mejor el traje de payaso que Pedro el chaqué... Así que, después de recorrer tooooodas las tiendas en las que poder disponer de un chaqué... parecía que habría que recurrir a uno hecho a medida, porque si no, el corte normal del chaqué, le queda como a Cachuli el cinturón, ("sobaquero") jajaja!!! No tiene desperdicio...

Después de muchas vueltas, resulta que la solución no la hemos encontrado tan lejos... En una de las tiendas nos ofrecieron un chaqué de largo especial, de Yuste... y la verdad... es que lucía impecable... lástima que del que disponían fuera gris, porque estaba guspísimo... Yuste es una opción que Pedro siempre ha tenido en mente, fundamentalmente porque es una de las principales marcas de trajes española, mi abuelo hablaba maravillas de su confección... y tiene la fábrica de toda la vida en Béjar (Salamanca), y como Pedro y su familia son de allí, pues de allí mejor que de ningún otro sitio!!!

Tampoco hemos encontrado muchas firmas donde poder elegir, ciudades más grandes como Madrid o Barcelona, disponen de mucha más variedad. De entre las marcas que más nos han gustado podríamos destacar, Ermenegildo Zegna, con sus cortes impecables y su toque inconfundible...

Fuentecapala, con alguna que otra excepción, ya que entre sus propuestas podemos encontrar algún que otro patinazo, tipo chaquetas brillantes y chalecos con texturas varias... aunque la propuesta a medida es bastante elegante y discreta.

Caramelo, con ese toque joven pero limpio y sobrio a la vez.

Hackett, un clásico entre los clásicos, con su toque inglés elegantísimo, que por desgracia, sólo hemos conseguido ver en catálogo...

Scalpers, modernos y atrevidos, con sus propuestas en azul oscuro, rompiendo el protocolo más estricto y con sus preciosos chalecos con esos pequeños toques de color que a veces son tan necesarios...

Y por supuesto Emilio Yuste, con unos tejidos italianos impresionantes y una confección impecable...

Supongo que muchos no entenderán el porque del chaqué, pero la explicación es bastante sencilla, es el traje de máxima etiqueta para el hombre para eventos y ceremonias que se celebran durante el día. El chaqué comenzó a utilizarse en Inglaterra por los caballeros para montar a caballo, por eso la chaqueta es abierta por detrás. Estos caballeros sólo utilizaban el chaqué por las mañanas y para ir de caza y ha quedado como la prenda más elegante para los hombres, aunque actualmente, también se utilice para la noche.

Las piezas fundamentales del Chaqué son las siguientes:

La levita.

Es una chaqueta con cola y terminada en dos puntas, su color suele ser negro o gris marengo, color que se reserva preferentemente para bodas de mañana.

El chaleco.

La gente joven suele utilizar el color gris y el negro para los hombres de mayor edad. Aunque en el caso de los novios se permite utilizar un chaleco de color o estampado y así poder distinguirlos del resto de invitados a la ceremonia.

El pantalón.

Suele ser gris con líneas verticales de color negro, siempre sujeto con tirantes.

El protocolo nos dice que ésta elección debe hacerse para bodas que se celebran durante el día, si el novio lo lleva, testigos y padrinos deben de llevarlo y por el contrario, si el novio no lo lleva, nadie puede llevarlo, al ser la etiqueta máxima y para bodas que se celebran durante el día, el protocolo dice que las mujeres acompañantes de los testigos y padrino deben llevar pamela.

El botón de la levita debe ir siempre abrochado y sólo desabrocharlo cuando nos sentamos a comer. El primer botón del chaleco puede ir desabrochado para dejar sitio a la corbata, no se puede quitar la levita durante toda la ceremonia.

Espero que más de uno tome nota, porque es horrible que un hombre se quite la chaqueta de un traje o la levita en éste caso... A veces, hay que ser un poco sufrido y hay buenas costumbres que conviene no perder, aunque duelan!!!

Un beso y buen finde!!!